24 nov 2008

Pedro Barragán.

Na bamô conzegío zabè de Pedro Barragán, l’autò de Zafarí. Novela de Costumbres granadinas. Ni ziqiera er prólogo e la nobela ehcrebío pô Melchor Fernández Almagro nuh da ningún dato e zu biografía. Zolamente poemô intuì pô la fexa e la publicazión e la nobela (1942) qe bibió arreò e mediô er ziglo XX. I pô la ehplicazionê etayà e la cohta granaína, aonde zitúa ar pueblo imahinario e Zafarí, poemô intuì qe nazió o bibió n’ezô roalê.
L’autò uza l’andalú ehcrebío profuzamente en cazi tô lô diálogô "con todos los accidentes de léxico y construcción que le hacen aceptar, por lo que hace a Zafarí, unas determinadas formas dialectales" zegún indica er prologihta Melchor F. Almagro. Anqe dihcrepamô der Melchor qe ehtâ hormâ dialertalê zean der pueblo granaíno cohtero, ya qe Barragán haze sesear a zû perzonahê i en la cohta e Graná ze zezea, anqe ze zuabemente. La nobela tié un gran interè pa l’ehtudio e l’andalú, no zolamente po l’utilizazión de l’andalú ehcrito –qe incluzibe l’utiliza n’argunâ palabrâ en dentro e la narrazión, anqe n’ehte cazo lâ pone en curziba- zino tamién pô l’uzo d’un bariao lézico i l’empleo d’interezantê hormâ zintárticâ.

Tehto:
—¡Briboneh, máh que briboneh!, que toh jabéi andáo trah eya como etráh de tóah, na máh que pá perderla y lo máh pá casaro. ¿Pa dale qué? ¡Pa dale paloh, paloh con una güena vara de armendro y nesesiáes y jambre y criaturah. ¡Que seih máh malo quer sebo y soh repudríh porque jay quien con su aquer sano mira por eya!
—¡Vamoh, agüela, que de siempre le já tiráo a usté er señorío! —dijóle un mocico escuchimizado—. ¡En luga de jablá tanto, má valía que le trajera a estoh hombreh treh o cuatro pernileh de Trevele y una damajuana de vino de Calonca, o manque sea de Morvisa, y sinó un sarchichón como de aquí a Lobreh!
—Yo, desde que nasí, estaba acostumbrá a ver cabrah en mi casa. Pero poco a poco, unah veseh por unah cosah, otrah por otrah, se fueron muriendo. Cuando ya empesé a salir con eyah ar campo no queában mah que doh —¡paése que lah estoy viendo!—, la Pinta y la Canela. Esta parió un chotiyo que tenía lah patáh blancah y to lo demáh der cuerpo mancháo, lo mismo que su maére. ¡Y no crea, me iba con ellah mu lejísimoh! ¡Jasta una torre de loh moroh, que pegaba en eya siempre un viento mu fuerte que casi erribaba a los animaleh, y yo misma me tenía que tirar al suelo y agarrarme a loh riscoh; el choto parecía que tenía las patah de trapo y muchas veceh caía roando! Por entonces a mi hermano mayor se lo yevaron a una guerra mu lejoh, que pué que usté jaya oío jablá deya: la guerra de Cuba. ¡Ajú, loh hombreh que cogieron payá! Y yo me pasaba lah horah muertah mirando ende el pié de la torre, porque a lo alto no se podía subir por no tener techo, mirando a ver si venía, como yegó un día er der cortijo de loh Escotuteh, que aunque venía con una enfermedá que yamaban paludismo, pues tó er mundo s'alegró mucho. ¡Puéh yo venga a mirá y mirá por si venía mi hermano, que enjamah volvió! Yo, ¡lo que es la inorancia!, le iba guardando tó lo que me paesía que le jabía de gustá. Una ves me encontré junto a las senisah de una lumbrera jecha por casaoreh una navaja enroviná; pon fui y la estuve limpiando y limpiando, venga a dale jasta que la puse como de plata y con un filo que cortaba lah ramah como sí fuán de sera. Pues señó, otra veh voy y me encuentro unah cosah como d'oro, que golían como asufre y como güelen lah tormentan; yo loh escondí pa mi hermano ebajo una piedra, la que me recuerdo que tenía una araña mu gorda cuando la levanté. jLo que é la inorancia! ¡Aluego resultaron eran como balah de lah escopetah con lah que casan los señoreh! Un día la Canela empesó a jincharse, a jincharse. ¿Señó, qué tendrá este animá? Mi agüelo, en cuanto lo vió, va y dijo que había bebió agua de jabón de aonde lavaban las mujereh... ¡Aquella noche, de madrugada, pueh se murió!

Juan Rodríguez Mateo

Nazió en 1888 en Coria, pueblo zebiyano ribereño der Guarqibì. La profezión e zu pae, negoziante e lô puertô flubialê, le permitió bizità con frecuenzia otro pueblo ribereño, Zanlúcâ e Barramea ar qe profezó ehpezià cariño hunto ar zuyo natà. Ehtudió Baxiyerato en Zebiya, título qe le permitió eherzè e maehtro primaria en Coria der Río. Endihpuè e diè añô d’eherzè er mahihterio entró en la carrera arminihtratiba, yegando a zè Zecretario e l’Ayuntamiento e zu pueblo, ahta zu hubilazión. Zimurtaneó zu profezión con otrâ artibiaê como zu pertenenzia a la Zozieà Económica d’Amigô der Paì, a l’Acaemia de Guenâ Letrâ e Zebiya, profezò e declamazión en la Ehcuela d’Arte Dramático, i con la pertenenzia a l’Ateneo e Zebiya der qe yegó a zè zu preziente e la zerzión e literatura. Ayí conzidió con Blah Infante con er qe compartió loh idealê andaluzihtâ i zozialê qe bemô reflehaô en la obra de Rodríguez Mateo publicá con anterioriá ar 1936. Zu ehtilo i zu temática populà azin como zu gran faziliá pa la declamazión le yebó a zè conziderao como er poeta der pueblo.
A zu época primera, de carártê mâ zozià, pertenezen librô como: "Fábulas", "Campezinos", "Romances del Rocío", "Canciones de la Ribera" o Marismas". Era er tiempo n’er qe ze relazionaba con la intelertualiá andaluzihta i progrezihta e l’Ateneo como er zitao Blas Infante, José Andrés Vázquez, Alejandro Guichot o Fernando de los Ríos. Hué armiraò e poetâ e zu época como García Lorca, Alberti o Manuel Machado con er qe mantubo una gran amihtá. Endihpuè e la gerra, Rodríguez Mateo ze buerca fundamentarmente en er tema relihiozo y en er forclórico. A ehtô temâ correhponden títulô como "Plegarias", "Saetas", "Alabanzas a la Virgen del Rocío", "Romancero del campo andaluz", "Cantares del campo andaluz", "Romances del Guadalquivir" i azín ahta treinta i trê librô publicaô, a lô q’ai qe añaì zuh artículô en rebihtâ i diariô i zu obra inéita. Como ize zu biógrafo Daniel Pineda Novo "Rodríguez Mateo llevaba en su alma la poesía andaluza, y la forma andaluza de la poesía, vive en sus versos, y anida en sus libros y por ser coriano y poeta de Sevilla, puede ser llamado Poeta de Andalucía."
Poemô conzierà a Juan Rodríguez Mateo, zigiendo a Joaquín Caro en la zemblanza qe le haze en er Dirzionario d’Ateneihtâ III "este hijo predilecto y preclaro de la Villa de Coria del Río demuestra ser uno de nuestros mejores poetas dialectales.". Porqe, efertibamente, Mateo emplea en argunâ e zuh obrâ –ehpeziarmente en "Campezinos-Poemas andaluces" i en "Marismas" l’andalú ehcrito pa reflehà l’abla dialertà der pueblo andalú. Ar finà e Campezinos er poeta incluye unâ notâ fonéticâ i ortográficâ i una aclarazión der lézico empleao.
Tehtô:

Der libro "Campezinos-Poemas andaluces"

NIÑO POBRE

¡Er niño e la caza grande
no quié juntarze cormigo!
¿Por qué tos los niños, mare,
no zemos tos niños ricos?
Tú bería como entoze
iba yo mu bien bestío,
con mis zapatitos nuebos
i mi gorra de marino.
………………………..
¡Tú beria como entonze
cuantito me biera er niño
que bibe en la caza grande,
me quedría por amigo!...
¿Por qué tos los niños, mare,
no zeremos niños ricos?
der libro "Marismas"

EL ZAGAL DESPIERTA

...Que ze güerban
ezas golondrinas
negras, negras, negras,
que ca be que bienen zu cante m'ajoga
i toíto mi cuerpo spíe candela.
……………
porque aonde me sconda,
juyendo, m'encuentra,
i no pueo aguantá las carizias
de zus manos frescas:
¡Que me muero de mieo, cuando ziento
bení la marea!

José Carlos de Luna

José Carlos de Luna Sánchez nazió en Málaga en 1890, bibió en Zan Roqe (Cai) i murió en Madrid en 1964. Ehtudió Inheniería Induhtrià i dezempeñó er cargo e Gobernaò Cibì e Badahò i Zebiya cuando la República. Hué poeta, periodihta, flamencólogo, dramaturgo i ihtoriaò. Como periodihta huè colaboraó e bariô Diariô (Diario de Cádiz, ABC, Informaciones...). Hué miembro e la Reà Acaemia e la Lengua. D’entre zuh obrâ poéticâ poemô dehtacà: De cante grande y cante chico, El Cristo de los Gitanos, La taberna de los Tres Reyes y El café de Chinitas. Tamién ehcribió obrâ e teatro: Una loba, Manjarí; una zarzuela: Las Viejas Ricas i argunâ obrâ ihtóricâ i d’enzayo como Historia de Gibraltar, Historia de Málaga y su provincia, y Gitanos de la Bética. Cuando recopiló letrâ e flamenco tubo l’azierto e trahcribil·lâ con grafía andaluza.
Ehte autò arcanzó gran popularià con er poema "El Piyayo", er retrato d’un perzonahe populà e Málaga. Ehte poema, en er q’utiliza l’andalú ehcrebío en la parte qe trahcribimô aqí ehtá recohío n’una antolohía e zû berzô titulá mihmamente Versos.

EL PIYAYO
……………….
Y entre carantoñas les va repartiendo
Pan y pescao frito,
Con la parsimonia de un antiguo rito:
¡chavales!
¡pan de flor de harina!
Mascarlo despasio.
Mejó pan no se come en palasio.
Y este pescaito, ¡no es na¡
¡sacao uno a uno del fondo del má!
¡gloria pura é!
Las espinas se comen tamié,
Que to es alimento...
Asi....despasito.
¡no llores, Manuela!
Tu no pués, porque no tiés muelas.
¡es tan chiquitita
mi niña bonita!
..así, despasito.

Jesús García Ricote

No bamô conzegío zabè na e zu bìa, anqe zí creemô, pô la fexa e la publicazión e la obra qe bamô poío conzurtà (1950), q’a bibío arreò e lô dô primerô terziô der ziglo XX, i qe la mayoría e zu obra la ehcribiría en la pohgerra, una época en la qe ze leían nobelâ por entregâ, nobelâ q’ablaban e curâ tentaô, bandíô henerosô, de xiqiyâ enamorà, como "Huan de Diò, er meico e lô probê", "Huan León, er rey e la zerranía", "Henobeba e Brabante" o "Diego Corrientê, er ladrón d’Andaluzía" er qe a lô ricô robaba i a lô probê zocorría. Argunâ d’eyâ firmà por ehte autò, anqe ze zohpexa qe pa lah otrâ uzaba zeudónimô. En zuh obrâ, anqe l’autò uza er cahteyano, n’argunô e lô perzonahê emplea l’andalú ehcrebío. Eze ê er cazo der tehto q’abemô ehcogío e la obra "Juan León, el rey de la Serranía":

No llevaría andando un cuarto de hora cuando un hombre de unos cuarenta años salió a él y le detuvo.
-Buenas, Antoñito- le saludó.
-Muy buenas, Josele.
-¿No te ha echao mano er guarda de Casas Nuevas? Mia que tiés suerte, Mejorana…
-Si tu supieras lo que me ha pasao, mejor lo dirías..
-¿Er qué te ha pasao?
-Ná, que me ha pillao er guarda y me ha llevao detenío ar cortijo, tras de atisarme dos o tres morrás.
-¿Y a eso llamas tener suerte?
-Aún no he terminao.
Josele miró con gran interés al Mejorana.
_¿Tres de las morrás, arrepentío, te ha dao un cacho de pan y un trago de montilla? –le interrogó.
-¡Je, je! Menúo es el Mestiso para dar ni los buenos dias a su madre. Pero en Casas Nuevas estaba el ama. ¿Tu conoces al ama de Casas Nuevas, Josele? ¿No? Pues entonses dí que no conoses a la Virgen María, con su cara de ángel y su cara divina.

20 nov 2008

Blas Infante Pérez

Blas Infante Pérez (Casares-1885. Sevilla-1936)

Notario, impurzò e lô Centrô Andaluzê y lâ Huntâ liberalihtâ. Ehcritò e bariah obrâ zobre ihtoria, penzamiento, múzica, teatro y leteratura. Azezinao en Zeviya pô lô inzuhentê pô “qerè creá un partío andaluzihta”. En argunô e zû textô recohe la nezeziá d’una grafía propia pa l’andalú, anqe apenâ yegó a ehcrebí n’andalú. Zolo lo hizo en er libro Cuentos de animales.
Blas Infante intuyó lo qe argunô trabahô ehtán zacando a la lú: la gran importanzia qe tié en la fonética andaluza ahtuà er zuhtrato andalusí. "Las variantes fonéticas andaluzas se deben a influjos clásicos de una gran cultura pretérita (:..). Un pueblo de viva imaginación y de expre­sión rápida no puede tener el pensamiento detenido" (Iniesta Coullat-Valera, Enrique.Los manuscritos inéditos de Blas Infante. Fundación Blas Infante. Sevilla-1989, ACE, 2).
Por ezo, cuando Infante se pone a ‘hcrebí n’andalú zu cuento der Lobo Preferío, ze tié q’enfrentà a la dificurtá e no contà con un zihtema ortográfico: : "El lenguaje andaluz tiene sonidos los cuales no pueden ser expresados en letras castellanas. A1 `alifato', mejor que al español, hay necesidad de acudir para poder encontrar una más exacta representación gráfica de aquellos sonidos. Sus signos representativos se los llevaron los árabes con su alfabeto dejándolos equivalentes en el alfabeto español. Tal vez hoy alguien se ocupa (?) en la tarea de reconstruir un alfabeto andaluz. Pero mientras tanto, es preciso valernos de los signos alfabéticos de Castilla”.
De zeguro q’Infante, zabiendo der grao d’acurturazión cahteyana en er tema lingüíhtico ar qe ze zomete a lô andaluzê en la ‘hcuela, dehconfía e la “intelehtualiá andaluza” cahteyanizá, y azín lo deha ehcrito en otro e zû tehtô inéditô qe recohe Enrique Iniesta: : “Letras o signos ortográficos, contextura gramatical y literaria tiene que crearlos el pueblo" (ADH, 3).
No zabemô, pero è d’imahinà, qe zi no huera zío azezinao y no huera triunfao er lebantamiento nazionalihta ehpañol, dezeguro q’ubiera podío ganà er premio qe mâ lèhtimulaba: "Yo no he ganado todavía el premio que más me estimularía: el poder vivir en andaluz, percibir en andaluz, ser en andaluz o escribir en andaluz" (ACR, 84). (Iniesta Coullat-Valera, Enrique. Blas Infante. Toda su verdad. Volumen I (1885-1919). Editorial Comares. Signatura Ediciones. Granada 2000)


EL LOBO PREFERÍO

Cuentos de Animales

-Veráhté cómo jue er suseío. Preferio era d'hte...

Era mihto de lobo y de perro. Su agüelo jue lobo. Ehte lo crió, con leche, dehde chico.

Preferio iba siempre con er ganao. Ya se poía ohté acohtá o ise andequisiera. Mejó que ohté guardaba er ganao Preferio. Paese que l'ohtoy viendo! Se tendía a ehta ora, a lanochesé, elante e la puerta d'hta chosa. Si su amo quería echále un peaso e pan, se lo comía; si no, ¡tan campante! «¡Preferío, a la majá!», esía ehte cuando iba a mete-se pa dormí, aentro ese palasio. Y allá iba Preferio a velá er sueño der ganao. Ya poían vení loh loboh! Anteh'e conosé er poé e Preferio se yegaban argunoh a ehta majá... Pero ehpueh que loh jiso corré muchah veseh con loh pehcuesoh ehtrosaoh, ya no gorvieron a tocá ni un beyón e lana e lah oveja d'ehte...

Y no paró aquí la cosa. Veráhté. Loh loboh, ehpantaoh e Preferío, no vinieron mah a ehta majá..., pero jueron a la mía y a lah de otroh pahtoreh... Pero ¡ah, amigo! En cuantito sentía er perro (¡y que no era na e sentio!) que loh loboh andaban enreaoh con er ganao de cuarquier majá, como él ehtaba seguro de que aquelloh bichoh, por mieo, no se iban a llegá a la suya, ayá venía a defendernoh a toh, en buhca e loh loboh, y loh loboh, en cuanto lo veían, ¡a corré s'a dicho!; y miuhté, toh teníamoh así er ganao guardao, y por ezo entre toh nozotroh le puzimoh Preferio... ¡Quién iba a pensá que de la noche a la mañana...! Lo que zon lah marditah mugereh!

-Poh veráhté... Hase coza e un meh ezapare­sió Preferío... Toh loh pahtoreh que moh entera­moh e la perdisión d'er perro, moh subíamoh en loarto de lah peñah y sirbábamoh llamando ¡¡Preferío!! iPch..., pch..., Preferío!». ¡Ka; Preferío no acuía! «¿L'abrán matao?», dijo uno. Y entose lo buhcamoh y buhcamoh, y… na. Jahta q'un día...; mejó: un alba.

….

-¡Pero hombre, cuenta bien lo que jasían loh loboh, anteh e sabese na! -exclamó, alzando la cabeza, el amo, hasta entonces silencioso, de Preferío.

-iAh, eh verdá! -repuso el narrador, y aña­dió-: Poh lo que pasó jue que Dioh no podía con loh loboh. Q'en toítah lah nocheh venían, ya a mí majá, ya a lah de otroh pahtoreh, jasiendo de ca ve una sanfransia... iHombre, y cosa rara!... En la majá d'ehte no entraban nunca. Entose, biendo que loh emáh perroh ehtaban muertoh o acobar­daoh, ihpusimoh que toah lah nocheh moh queá­ramoh e sentinelah pa da batíah a loh loboh. En cuantito sonaba un tiro en una majá, acuían vo­lando y se liaban a tiroh loh compañeroh de lah otrah, y así moh puimoh cargá treh loboh entre toah lah nocheh.

... Poh señó: que a la majá d'ehte, sin acuí. Y ehte se acohtaba disiendo: «iToavía s'acuerdan esoh fulanoh de mi Preferío!».


INFANTE PÉREZ, BLAS. Los amores de la hermana loba y la traición del perro “Preferío” CUENTOS DE ANIMALES. Fundación Blas Infante- SM Ediciones. 1984

Manuel de Góngora

Manuel de Góngora(1889-1953)

Er poeta, ehcritò, periodihta y libretihta e zarzuelâ Manuè e Góngora Ayustante nazió en Graná l’año 1889. Ehtudió Filozofía y Letrâ en zu ziudá natà pa endihpuè irze a Madrí aonde ze dortoró.
Hué arxibero e la Diputazión e Graná, aemâ e profezò e la Facurtá e Letrâ en la Universià Granaína.
Como periodihta hué redartò der zemanario Blanco y Negro, y correhponzà der Diario ABC n’Argentina aonde afincó zu residencia, en Buenos Aires, y aonde murió en 1953.
Entre zuh obrâ líricâ como autò e tetro poemô rezartà “Curro de Lora” en colaborazión con José Tellaeche y múzica der tamién granaíno Francisco Alonso. Obra q’en zu momento no tubo guena acohía y qe za recuperao endihpuè de 82 anô. En colaborazión con José Tellaeche tamién escribió “La casa de las tres muchachas”.
Utilizó l’andalú ehcrito en argunâ e zuh obrâ como “La Paz del Molino” y “La fama del tartanero”, ehcritâ en colaborazión con Luis Manzano.

LA FAMA DEL TARTANERO

Zarzuela en dos actos,
con libro de Manuel de Góngora y Luis Manzano.
Música del maestro Jacinto Guerrero.
Estrenada el 2 de Octubre de 1931 en el Teatro Lope de Vega, de Valladolid,

Don Luis de Aguilar pretende a Blanca, y aunque esta le rechaza, él se jacta ante sus soldados de poderla conquistar.
Curriyo, también enamorado de Blanca, se muere de celos por el militar y Juan León.

CURRIYO
¡Blanca mía de mi via
siempre yevas tú rasón;
pero en yamas de selera
se me abrasa el corasón!

BLANCA
¿Pa qué quiés atormentarte
y yorar y mardesí,
si mi sangre y mis sentíos
y mis ansias son pa tí?

CURRIYO
¡Si en mi poder estuviera
como una yerba dañina
me arrancara esta selera!
¡Pero no pueo!
que de tó lo que tus ojos o tus
manos acarisian
tengo mieo!...
¡Tengo mieo!
Tengo selos
del suspiro que suspiras
de las flores de tu pelo
del espejo en que te miras...
¡Tengo selos!
Tengo selos,
de tu arcoba y tu cansela,
de tu tierra y de tu sielo,
del charó de tu chinela...
¡Tengo selos!
¡Selos que no tienen
acaso razón;
por eso son selos; pero que atormentan
más mi corasó!
¡Mi corasón!
Tengo selos,
de las piedras de tu caye
de tu sueño y tu desvelo
de la sinta de tu taye...
¡Tengo selos!
der sarsiyo de su oreja,
de tu broche y tu pañuelo,
de los hierros de tu reja,
¡tengo selos!

BLANCA
Si en mi poder estuviera
como una yerba dañina
te arrancara esa selera.

CURRIYO
Y yo quisiera
que tus ojos y tus labios y tus besos
aliviaran
mi seguera
¡Mi seguera!

BLANCA
¡Tu seguera!
Son los selos,
criminal que te asesina,
amargura sin consuelo,
y dolor sin medesina.

CURRIYO
¡Son los selos!

BLANCA
Son los selos,
latigasos de tormenta
asotando un barquichuelo,
un castigo y una afrenta!

CURRIYO
¡Son los selos!

BLANCA
Selos que no tienen
ni ley ni rasón;
por eso son selos;
¡pero que por eso más hondos se clavan
en mi corasón!

CURRIYO
¡Ahhhh!

BLANCA
¡Son los selos!

CURRIYO
Son los selos,
la peor se las caenas
y el más duro de los yelos
la más triste de las penas.

LOS DOS
¡Son los selos!
Selos que yanto acarrean
y nos hieren a los dos,
¡marditos por siempre sean!
¡marditos sean de Dios!

Antonio García Gutiérrez

Antonio García Gutiérrez (1813-1884)

Antonio María e lô Dolorê Garzía Gutiérrê, nazió en Xiclana er 1813. Hué un ehcritò romántico con munxâ obrâ de tó clazê, puê ehcribió obrâ dramáticâ, libretô e zarzuelâ y poezía. Abemô e rezartà qe bino ar mundo en un perió e la ihtoria y en un roà en er qe abundaban mu pô lo henerà lah’ ideâ liberaê. Como leterato ze le nota mu der prinzipio l’influenzia e la lertura e lâ obrâ e Larra.
De zagà prinzipió colaborando en diberzâ publicazionê y como zabía l’idioma franzè traduho obrâ d’argunô autorê mu conoziô como Alejandro Dumas. Tamién de mu zagà le yegó l’ézito y la fama con er drama romántico El trovador, obra en proza y verzo en la qe ze nota munxo l’influenzia e Larra y en er ehtreno zuyo –cuentan lâ crónicâ der momento- hué mu aplaudío y aclamao pô er público qe le hizo zubì a l’erzenario a zaluà, en prinzipiando azín eza cohtumbre q’a perdurao aht’aora en lô ehtrenô teatralê.
L’èzito d’eza obra yegó ahta Italia, aonde Giuseppe Verdi hizo una adartazión operíhtica en Il trovatore. Tamién ze hizo otra adartazión a la ópera d’otra e zuh’ obrâ q’abían tenío ézito: Simón Bocanegra.
Ende zu Xiclana natà hué a bibì a la capità er reino, aonde z’iban la mayò parte e lô autorê d’ézito. Endihpuê d’argunô añô en América tubo bariô trabahô e diplomático en Londrê, Italia y Franzia, arternaô con ehtanziâ en Madrí, aonde hué miembro e la Reà Acaemia Ehpañola y dirertò der Muzeo Arqeolóhico Nazionà.
Antonio Garzía Gutiérrê reflehó zu ideolohía liberà en dramâ ihtóricô como La Venganza catalana, Juan Lorenzo, El tesorero del rey, El encubierto de Valencia o El rey monje; y zû procupazionê zozialê como Sendas opuestas, Los desposorios de Inés, Un grano de arena, Los millonarios y El caballero de industria. Tamién ehcribió comediâ como Crisálida y mariposa; y zarzuelâ como El Grumete, La cacería real, y Llamada y tropa. Realizó argunô trabahô líricô como Poesías y Luz y tinieblas qe no yegaron a tenè l’ézito qe la berzifiazión e zû dramâ ihtóricô, con la ezerzión er poema ¡Abajo los Borbones! (1868) compuehto ar triunfà la reboluzión d’eze año, y qe ze hizo mu populà.
Anqe no hué mu proliho en la’ hcritura n’andalú zi q’abemô encontrao una e zû obrâ n’andalú: la parodia titulà Los hijos del tío Tronera.
Reproduzimô aqí una ehzena e la obra y zuh ponemô la direrzión e la páhina en la qe ze pué bè la obra to entera:

http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/paro/12473850822367162109435/p0000001.htm#1

Escena XIII

Los mismos, INESILLA.

INESILLA
Manué.

MANUEL
¿No es una ilusión?
Cuando esa vos he escuchao,
un gorpe aquí me ha sonao
en er mesmo corasón.

INESILLA
Yo soy, Manué. ¿Qué te espanta?

MANUEL
Siéntate.

INESILLA
No puée ser.

MANUEL
¿No?

INESILLA
No hay tiempo que perder,
juye de aquí.

MANUEL
¡Virgen santa!
¿Y eso es cierto?

INESILLA
La verdá.

MANUEL
(¡Es una jembra sublime!)

INESILLA
Pero espáchate.

MANUEL
Antes ime...
¿Quién te dio esa facurtá?

INESILLA
¿Quién ha de ser? El arcarde.

MANUEL
¿Con Bartolo hablaste, Inés?
Mi amor le has vendío.

INESILLA
¡Pues!

No lo quiso hacer de barde.
¡Ea, najensia!...

MANUEL
¡No me voy!
No quiero yo libertá
si pierdo tu voluntá.

INESILLA
¡Ya sabes tú quien soy yo!
Pus bien, nájate y no temas.
¡Ay!

MANUEL
No suspires por mí,
infiel; ni te quiero aquí;
vete, Inesiya.

INESILLA
Pamemas.
Ay no me jagas hablá.

MANUEL
No te pongas aflegía,
farsa. Probe maire mía,
tú no sabes engañá.
Tú sola con tu querer
juiste firme.

INESILLA
Dúas pronto,
¡Manué!, ¡ay!

MANUEL
No, que es un tonto
quien fía de una mujer.

INESILLA
Esto no se puede aguantar:
en quererte estuve loca.

MANUEL
Mira... cáyate la boca.

INESILLA
Tóo te lo voy a cantar.

MANUEL
Jabla.

INESILLA
¿Es justo, Manoliyo,
que tú me trates así,
cuando he tomado por ti...
tres onsas é cardeniyo?

MANUEL
¡Santo Cristo! ¡De verdá!
Pero ime, ¿quién te lo dio?

INESILLA
Siempre lo yebaba yo
pá cuarquié nesesiá.

MANUEL
Tan heróico sacrifisio...

INESILLA
¡Ay! Siento aquí en este lao...

MANUEL
Eso pronto está curao
con aseite é Aparisio.
Si te apura, yamaré.

INESILLA
No ta partes: yo me muero.

MANUEL
Eja.

INESILLA
Yo morirme quiero;
pero a tu láo.

MANUEL
(¡Qué jaré!)

INESILLA
¿No sabes que te quería
con tóo mi corasón?

MANUEL
Inés, ¡sin aulasión!
has jecho una tontería.

INESILLA
¡Ven aquí! No me esampares.
Ay! ¡Siento que ya me jundo!


MANUEL
¡Tú no has venío a este mundo
sino pa darme pesares!

INESILLA
¡Manué! ¡Manué! ¡Que me voy!
La mano...

MANUEL
Toma, y espacha.
(Qué lastima é muchacha.)

INESILLA
No ta lejes.

MANUEL
Aquí estoy.

INESILLA
¡Adiós, adiós! (Muere.)

MANUEL
¡Yá espichó!
¡Más fría está que un graniso!
Pero, en fin, ella lo jiso
por su gusto, y lo logró.
¡De su vía er triste fin
la mata en su moseá!
¡Y dempués de muerta, está
lo mesmo que un querubín!
¡Murió la lus de mi arma
y mi esperansa me quita!
¡Ay! ¡Probe Inés! ¡Probesita!
¡La van a enterrá con parma!
¡Y es que se murió é veras!
¡Inés, escucha mi afán!
¡No quiere! Ganas me dan
de cantale unas playeras.
La ocasión es la mejor...
Pero, ¿quién se aserca ayí?
¿No es er tío Bartolo...? ¡Sí...!
¡Paese un trasquilaor!

Francisco Javier de Burgos y Sarragoiti

Francisco Javier de Burgos y Sarragoiti (1842-1902)

Nazió en 1842 en Er Puerto e Zanta María (Cai). Anqe zu pae l’obligó a ehtudià inheniería, en realià zu bocazión e hoben era la leteratura. Como ehta no zerbía pa comè, zi no erê un autò mu conzagrao, entozê ze buhcó la via con er periodihmo, primero en zu pueblo natà y endihpuè en Cai, onde tamién trabajó en er Gobierno Cibì. Zu ézito como periodihta le yebó a Madrí onde colaboró en lôs diariô El Contemporáneo y La Palma, der qe yegó a zè dirertò.
Ar mihmo tiempo qe trabahaba como periodihta, Javier de Burgos ehcribía obrâ e teatro. No cozexó munxo ézito como autò e melodramâ, pero zí qe conzigió la fama en zu maurè como zainetihta. Uno e zû zainetê, El baile de Luis Alonso, huè mu conozío y ze conbirtió en un gran ézito, ya como zarzuela, con múzica er maehtro Jerónimo Jiménez.È n’ehta obra, mihmante, onde Javier de Burgos utiliza l’andalú ehcrito pa reflehà argunô perzonahê popularê der Cai e madiaô er ziglo XIX. Uno d’ehtô è er perzonahe de Luis Alonso, qe ze baza en una perzona reà, profezò e baile caitano, qe l’autò conozería perzonarmente o por refereziâ.
Ante l’ézito e público e la obra, er mihmo autò ehcribe er libreto e otra zarzuelita bazá en er mihmo pernonahe: La boda de Luis Alonso. Zi en la primera obra Javier de Burgos utiliza l’andalú zolo en argunô e lô perzonahê, en La Boda… utiliza l’andalú en tô eyô. Un andalú zarpicao e términô calò, por zè hitanô zû protagonihtâ.
Aqí bemô un troziyo e la obra:

La Boda de Luis Alonso:


GRABIÉ (Con exageración dramática.)

¡Josú!
Esa rosa bendecí
junto a un espárrago seco!...
¡Una onza de oro bonita
á la vera é una parpaya!...
Señó Chano, ¿usté se orvía
que entre ella y yo ha habido cosas
formales y positivas?

CHANO (Mirando con recelo a su alrededor )
¿Te quiées callá, esaborío?
GRABIE
Yo tengo comprometía
mi palabra é casamiento,
y ella á mi ma dao riliquias .

CHANO
¿Ella?

GRABIÉ
Si, señó; un mechón
de su pelo de atrá, asina. (Señalando.)

CHANO
¿Que tienes tú pelo suyo?

GABRIÉ (Juntando las manos y con entonación dramática)
¡Con un oló á blandurilla!...

CHANO
Pus te voy á arrancá er pelo
y a romperte dos costillas...

GABRIÉ
¡Señó Chano!..

CHANO
Y á jacerte
un boquete en la barriga
po onde te quepan dos perros
peleando. (Vase amenazándolo por la derecha )

GRABIÉ (Siguiéndole.)
Oiga usté... Se pira...
(Desesperado.)
Hoy va a ser la fin der mundo!...
(Con aflicción cómica.)

¡Ay, María Jesús!... ¡Perdía!...
¡Perdía pá mi pá siempre!...

(Serenándose de pronto.)

Hay que huí de esta mardita
casa, y jacé una aratáa.
Yo tengo mu malas tripas,
y si mojo y me echan mano,
no sargo en ocho canículas
del estarivé... Najencia.

(Despidiéndose en voz alta y en tono de amenaza.)

¡Tribu... desagradecía,
juro por toitos los santos
que comen pan allá arriba,
que se tenéis de acord
de Grabié, pá mientras vivan!


La obra se pué bè entera en: http://es.geocities.com/libretoszarzu/libretos/LABODADELUISALONSO.doc


Tamién to er libreto de El baile de Luis Alonso en:

http://es.geocities.com/libretoszarzu/libretos/ELBAILEDELUISALONSO.doc

Diego Terrero

DIEGO TERRERO (1830 - 1892)

D’ehte perzonahe nazío en Cai en 1830 zabemô de zu ezihtenzia literaria en andalú por zu relazión con er poeta i múzico ahturiano Teodoro Cuesta con er qe curtibó una guena amihtà i mantubo una polémica en berzo zobre lâ ehzelenziâ d’Ahturiâ i d’Andaluzía con er cruze cartâh ehcritâ en berzo i con zierta zorna guazona; Diego Terrero (en andalú) y Teodoro Cuesta (en ahturiano). Eh pozible qe l’amihtà entre er poeta ahturiano mâ populà der ziglo XIX, i er matématico gaditano, autò de Lecciones de aritmética y de álgebra elemental ze forharía en Oviedo aonde creemô qe Terrero ehtaría e profezò e matemáticâ; anqe de zeguro q’ehta ze conzolió en er Zírculo Mercantì i Induhtrià aonde Terrero era er prezidente e la zezión literaria q’organizaba qinzenalmente una belá poético-muzicà. Er piqe poético-rehionà entre lô dô amigô lo inizió er gaditano en 1870 con una primera carta a la qe no tardó en rehpondè Teodoro Cuesta, mehó poeta q’er matemático. Con zu rehpuehta, Teodoro ganó er relò d’oro q’ofrezía como premio er Zírculo Mercantì. Dehte cruze cartâ, la’h úrtimâ de 1881, a zalió un peqenyo libro q’a tenío bahtante diburgazión en diferentê edizionê, no zolo como foyeto aparte ( po ehemplo la qe editó Ed. Tipografía Uría hermanos, Oviedo, 1907 o la edizión Andalucía y Asturias : Polémica en los dialectos andaluz y bable, por Diego Terrero y Teodoro Cuesta; prólogo de Emilio Alarcos Llorach. Oviedo. Biblioteca Popular Asturiana, 1977) zino tamién dentro d’antolohíâ poéticâ der Teodoro en là qe z’a anyadío un poema ehcrito por Cuesta a Diego trâ zu muerte en 1892. D’una dehtâ, Cuentos de Xunto al fueu qe incluye Andalucía y Asturies (polémica con Diego Terrero). Edit. TRABE. Oviéu 2003. abemô zacao lô poemê e Diego Terrero.


ANDALUCÍA Y ASTURIES

Diego Terrero y Tiadoro Cuesta.
en 1870

[ Diego Terrero ]

¿No estuviste hacia Zebiya
arguna vez, camará?
¿Nunca vizte la Girarda
de su hermoza catedrá?
Puez no haz contemplao la torre
que hai maz digna d'admirá:
zi te dejaran caer
de lo maz arto, quizá
tardaríaz, y digo poco,
una zemana en bajar.
¿A Málaga nunca fuiste
ni a la vega é Graná?
Puez zilencio y punto en boca,
no güervaz a ponderá
d'Azturiaz las maravillaz,
porqu'ezto no vale ná.
Zi miramos a loz campoz
d'aqueya tierra encantá,
mos queamos atontaos
al ver zu fertiliá;
zolo con er paraízo
ze la pue compará.
Ayí z'encuentra de tó,
ayí no hace farta ná,
y tó es dicha, y alegría,
placeres, feliciá,
y quiziera uno viví
por toa una eterniá.
Zi vieraz aqueyos díaz
en que zolemos bailá
y que ar zon de la guitarra
ze canta la zoleá,
laz malagueñaz, playeraz
o cuarquiera otra toná,
er mundo ze viene abajo,
y loz angeliyos van
a ezcuchar con atención
la múzica celestial.
Cuando eliges por pareja
arguna moza juncal,
en tocándola er fandango
la veraz pronto zartar,
y diraz, «ezto no ez baile,
ezto ze yama volar»;
pero aquí por ezta tierra
que yo yamo esgraciá,
con zapatos é maera
loz he vizto yo bailá,
y un tambor con una gaita
que da ganaz é yorá
ez la múzica zubrime,
qu'acoztumbran a tocá.
El valor d'aqueyos hombres
ez ya coza proverbial,
por cuarquier palabra mala
ze dan doz mir puñalás
y ze quean después tan frezcoz
como zi no hicieran ná.
Conque, cáyate, compare,
y arguna vez vete ayá
para ver aqueya tierra
qu'es la gloria celestial:
y cierra mui bien er pico,
pues zi te oyen jablá,
t'aseguro que a loz perroz
lez zirven pa merendar.

II
(Tioadoro Cuesta)

III
[Diego Terrero]

¿Qué ez lo que'ztaz ahí jablando
pa creticar a mi tierra?
Ante tó, haz de tené
muchízima é la pruencia,
porque no tolero yo
ze jable d'eza manera
d'aqueya antezala er cielo.
¿Lo haz entendío, tío Morciella?
¡Que zolo comen gazpacho
con arguna otra friolera,
y también muchaz naranjaz!
¡Por via é mi fortuna perra!
No zé cómo con mi genio
lo mezmo qu'er d'una fiera,
no te he jecho una tortiya,
de un trastazo, la moyera.
De aquer vino é Jerez,
de aquer delicioso néctar,
¿aónde lo encontraraz tú
en la tierra é la mizeria?
Eze vino é manzanas
ezterrao é la iglezia,
eze que lava laz tripaz,
que no emborracha y refrezca,
te lo guardaz, güen amigo,
pa qu'otro ze lo beba,
que pa enjuagá la garganta
ez mejor er agua frezca;
puez yo eztoy acostumbrao
a entrá en una bodega
de dos mir doscientas pipaz,
y marchar de prueba en prueba
hazta coger una turca
que deje er cuerpo zin penaz.
¡Cudiao que ze necezita
tener muy poca vergüenza
pa celebrar ante un púbrico .
loz picoz e laz monteraz!
Eza ezpecie é candilez
que yevan en la cabeza,
y que tendrán mucha gracia,
pero qu'a mi me revientan.
¿Aónde eztán ezas mujerez
tan guapaz, tan jechiceraz,
que tienen una garganta
qu'ez máz blanca que laz perlaz?
¿Zon ezas que tienen bocio
y que hay por Mierez y Lena,
toítaz yenaz é coyarez
pa taparze laz paperaz?
Puez amigo, zon graciozaz
las mujerez é tu tierra;
tú nunca vizte lo güeno
ni zabez lo qu'ez canela,
y por ezo encuentraz gracia
en una coza cuarquiera.
Conque chavó, lo repito,
procura tener pruencia,
y cierra mu pronto er pico
pa no apurar mi paciencia,
pues t'arrimo un puntapié
de cierto mó y manera,
que vaz a dar un pazeo
de mir miyonez é leguas.

En 1881
(Diego Terrero)

Ende que zalí d'Asturiaz,
eztimao amigo Cuesta,
canzao é correr er mundo
m'avenzindé en ezta tierra,
aonde reina la alegría
en unión con la riqueza.
Ninguno aquí ha conocío
lo qu'ez zentir una pena,
por ezo ya toa mi vía,
y cien vias que tuviera
las pazaría en ezta gloria
ezperando por la eterna.
Tenía penzao jace tiempo
escribirte cuatro letras
pa zaber zi tu zalú
ze conzerva mala o güeña,
o zi acazo te morizte
pazando jambre y mizeria.
Zi juera azi, ya lo zabes,
te cayas y no contestas,
y yo mandaré encendé
a un Zanto-Cristo dos velas
pol arma é un esdichao
que no tuvo una peseta
y a pezar de zu talento
ziempre vivió en la pobreza.
¡Dios querrá por mi fortuna
no zea verdá ezta zospecha,
y que t'encuentres muy güeno
por más que milagro zea!
Como zé qu'eres mi amigo
y por mí bien te interesas,
te contaré en dos palabras
lo que gozo en ezta tierra.
Me cazé va por seis años
con una linda morena
que tiene en lugar de ojos
dos luceros, dos centeyas,
que me partieron el arma
al verlos la vez primera.
Me ha dao ya cinco chiquiyos,
dos varones y tres jembras,
que han de zer lo más zalao
que en toíto er mundo ze vea.
Tengo tantos olivares,
tantos cortijos y haciendas,
que no zé yo los miyones
a que ascenderá mi renta:
zolo de vino mandé
embarcao pa la Inglaterra
entre pipotes y pipas
diez mir doscientos cincuenta;
ze cargaron treinta buques,
ocho vapores de ruedas,
quince fragatas de hélice
y siete barcos é vela:
de jigos, pasas, naranjas,
y aceitunas cordobesas,
tengo yo más armacenes
que hay calabozos en Ceuta.
Cuando jizo Dios er mundo
dicen que puzo ezta tierra
en er zitio preferente,
jacia su mano erecha,
y a Asturiaz la colocó,
como ez natura, a la izquierda,
por ezo la pobresiya
ziempre z'encuentra entre niebla
y el jermoso azul der cielo
muy rara vez ze presenta.
Dos años estuve ahí,
y zi no zargo m'entierran,
pues quedé en tan poco tiempo
más flaco qu'un arma en pena,
y ya me tienes tan gordo
que no cojo por las puertas.
Aquí eztá el río Guadalete,
cuya memoria ez eterna,
aonde Rodrigo perdió
la bataya más sangrienta
qu'en jamás de los jamases
puede haber en una guerra.
La perdimos, ez verdá,
no hai más que tener pacencia;
pero cuarquiera conoce,
hasta un chico é la escuela,
qu'a nozotros ze nos deben
de Pelayo las proezas,
pues zi la hubiéamos ganao
ze pue jacer una apuesta
a que Pelayo, pastor
del monte llamao Auseva,
estaría entretenío
toavía jaciendo calceta.
Me dijo un paizano mío
que fue a eza a comprar duela,
que eztabas en el Hospicio
administrando zus rentas:
las que tu adquieras con ezo
me las clavo en la cabeza.
Vente p'aquí, Teodoriyo,
qu'en mi cortijo é Utrera
tendrás doscientos cabayos
y más é trescientas yeguas;
vivirás en la abundancia
zin conocer la mizeria,
y ze dará a tu talento
er premio que ze merezca,
porque a mí, pa loz amigos
lo que me zobra ez hacienda.
Zi no quisieras venir,
por cuarquier causa que zea,
te mandaré un regaliyo
de los frutos d'esta tierra,
y podrás comer entonces
con toa tu parentela
arguna coza mejor
que las fabes con morciella.
Déjate de danza prima
y aprende a bailar playeras,
que zi eze baile entristece,
er nuestro anima y alegra.
Adiós, Teodoro del arma,
adiós, mi bien, adiós prenda,
y que Dios te dé los hijos
por docenas é docenas,
qu'ez una fruta qu'abunda
en eza picara tierra.
Recuerdos a tu muge
y que ze conzerve güeña,
zabiendo tú qu'en er mundo
naide como yo t'aprecia.

Tomás Rodríguez Rubí

Tomás Rodríguez Rubí (Málaga, 1817 - Madrid, 1890)

Periodihta, político i autò e teatro. Dirihió er diario El Sur (1855-1856). Hué direhtò der Teatro Ehpanyó i académico e la lengua en 1860. Hué diputao, zenaò bitalizio i minihtro e Isabel II. Tamién colaboró en la primera gran enziclopedia qe ze hizo en Ehpanya a mediaô er ziglo XIX. Ehcribió numerozâ obrâ e teatro con lâ qe triunfó en lô ezenariô e Madrid, tanto dramáticâ, zentimentalê e ihtóricâ. Con zû “Poesías andaluzas” (1841) inizió lo qe poemô conziderà como poezía rehionalihta, carahterizá pò la utilizazión e l’andalú ehcrito i la recreazión e perzonahê curiozô.
Argunô e zû poemâ zon berdaerô cuadrô cohtumbrihtâ, como er titulao "La venta del jaco" o “la visita nocturna”, inspirá ehta úrtima en un cuadro aonde ze be a un bandolero ozerbando la cabeza e otro compae colocà a la bera un camino. No fartan en zû h’obrâ leyendâ localê i comediâ cohtumbrihtâ como La venta de Cárdenas (1842).

Paco Arbadulí


Poesías andaluzas- Biblioteca Virtual de Andalucía

Poesías andaluzas de Tomás Rodríguez Rubí - 3ª edición

Publicación: París A. Lefevre, editor y librero, 1853 (imprenta Dubuisson)


LA VISITA NOCTURNA

¡Várgame Dioz, esdichao!
¡En lo que vino á pará
tu cabeza! ¿Quién dirá
que eza es la e Paco el Zalao
al vela tan empina?
¿No mablaz ya, Pacorriyo ?
¿No zabes que hasta el Lucero,
tu valeroso tordiyo,
está ya como un cordero
y no come el probeziyo ?

¿No zabes que tu María
y laCurriya tu hermana
yorando están noche y día,
y man jurao esta mañana
que azi estarán toa su vía?

i Y no vez aquí á tu Anton
puesto elante e tuz espojos,
que al cumplí zu obligazion
la augustia e zu corazón
ze le zale por lo zojos?

Míralo bien, camará,
y zi ve tanto pená
esde eze palo no puéz
¡ay¡… jéchame una mirá
esde onde quiera que estéz.

Yo vengo á ve por la noche
tu chola, Paco, y no e dia,
porque temo que la mia
argun puscanó la ezmoche
pa jazerte compañía.

Si alguien aquí ze me encara
el trabuco es mi fortuna;
aquí la zombra mampara...
y pueo verte eza cara
con las lucez e la luna.

¡Paquiyo! ¿Jásia ónde estás?
Di, lumbrera e las lumbreraz,
¿ qué zan jecho tus tonás...
tus zalerozas playeras
no las oiremos ya mas ?

Ya no tendremos pendiente
el ánima e tus clamores;
ya á laz jas no echarás flores,
ni hayaremos un valiente
como tú entre los mejores.

Entre tos ya no tendremos
quien po nozotros responda;
ni hasañas junto jaremos,
ni juntoz á escape iremos
jásia las cuevas e Ronda.

¿ Y creerán ezos jurones
que no tenemos paziones
ni a nenguno enclinazion...
¿Pus qué, zeñó, los ladrones
no tenemos corason ?...

¿No zentimos nuestro mal
lo mezmito que caá cuál?
¿O penzais que no azpiramos
mas que á aqueyo que topamos
y á partilo por igual?

¡Ay !... vozotros los que eztais
en zocieá congregaos,
¿por qué cuando nos juzgáis
vuestra mano no yebais
al costal e los pecaos?

¿En él nenguno tenéis?
¿no oz ezcurrízteis jamás?
¿tan bien lo zojos ponéis....
¿ ó zolo con ellos veis
las culpas en loz emas?

¿No veiz que zomos jermanos?
Zi á tos los largos e manos
ze ajorcára... Voto á Bríos
que entonce, probes guzanos.,
oz ajorcaran á tos.

Porque vozotros pecáis
como un cualquiera jaría...
y aun con maz alevozía,
porque vozotros choráis
con mucha e la hiproquezia.

¡ Várgame Cristo
con la juzticia !
Zi eyoz sescurren
ez sin malicia
ez sin pensá.

¿Pues qué mas da,
gente zin freno,
quitá lo ageno
en un camino
ó en la ciudá?

¿ Y quién oz dió premizo
pa á lombre arrebátale azi la vía?
Ecime, ¿eze poztizo
poer pa dá mulé, quién os lo envía?
¿Quién, zino Dios monarca e sielo y tierra
que alienta á laz criaturas,
y al cabo las entierra,
podrá, zin zé profano,
meteze e zu misterio en la jonduras?
Vozotros, mizerables pecaores,
zois los que armásteis vuestra propia mano
y la nuestra tamien; porque zin tino
con eze zoberano
poer que oz regaláis,
en la pena igualáis
al libre montañez y al azezino.

¡ Paquiyo! ¿no ez la verdá?
contéztame, ¿no igo bien?
Esos pobretez ¿quién zon
pa manda noz den mulé?
Los que en los montez vivimoz
¿no emoz por ezo e comer?
¿no ha de ejarnos aquí el prójimo
ni aun lo que le zobra á él?
i No ! que nozotros marditoz
por ziempre zemos amen,
á la proste toz noz vemos
lo mesmo que tú te vez.
Pero escanza, Pacorriyo,
porque yo te vengaré,.,
zí, primero que me yegue
dacompañarte la vez.
Y estos caminoz y zierras
con zangre las regaré,
pa que zepan ezos mandríaz
que aunque á uno aprienten la nues
mal que lez peze, en la tierra
pa vengalo quean zien.
Y á los que pazen esde hoy
zin lástima esplumaré,
y todo lo que lez atrape
en un mez y en otro mez,
¡ ay ! en mizaz pa tu alma
á los frailes diñaré.
Zí, Paquiyo; y no taflijas
porque aquí zolo te vez,
pues cuando menos lo pienses
á acompañate vendré. —

LA VENTA DEL JACO

Zu mersé mire eza piesa. . .
¡este ez un bicho mu fiero!
¿y esta cola ? ¿ y la cabesa?
vamo... zi no tiene pero.
¿Pues y lo zojos?... ¡no ez na!...
zon senteyas..,¡no hay mas ver !..
miusté ; con eza mirá
está isiendo zu poer.
Y los piños ?... ¡ Jezucristo !
zon mas blancos que el marfin...
y en jamáz aquí za visto
un jaco con tanta clin.
¿Lo quié usté ve caminá?
lo mezmo zale que un taco...
¡Fe !.. ¡ Canina !.. ven acá...
encarámate en el jaco;
y yévalo recojío
hásia el camino e zan Roque...¡
Corto!,.. Canina, hijo mió...
y cudiao no te zesboque.

¿Lo veusté? ¡ Juy… qué pujansa!
es lo mejó que tenemos...
ni el mesmo viento lo alcansa...
¡Zi zon mucho aqueyos remos!
Ahora e mano cambió...
vea lusté... ¡qué gayardía!...
¡ Alabao zea el Zeñó,
que tales fortunas cria!
¡Canina !... ¡ para! al avío;
arrepare osté qué piel...
Vamo, zi quié usté ir zérvío
no hay mas que quearze con él.


¿ Que cuánto?... bien vale... azí
Dios ze olvie e mis pecaos,
lo mesmo que un maaveí...
zobre tresientos ducaos.

¡ Qué ha e ze mucho !... ¿no vusté
que eze potro ez una fiera?
¡Por zan Juan !—¿ Osté no ve
que ez e la casta e Valera?
Y que ze bebe los vientos,
y que los sielos escala...
vaya... vengan los dosientos
y pague osté la alcabala.

¡Ze acabó; no hay mas que hablá!
Zi osté ez el amo, on Jozé...
¡Luseriyo¡... ¡paza aya!...
¡Qué bicho ze yeva osté !!!...
¡Qué animal!... ¡vaya unas manos!..
que las jan pintao parese...
¡Jay!... ¡antez e zapartanos
éjeme usté que lo beze!
¡Lusero, mantente tiezo!.,.
Anda vete, probecico,
y toma mi último bezo...
¡Várgame Dios, qué jocico!
Zeñó on Jozé, no pueo má...
¡llévelo usté, por Jezú!...
que no lo güelva á mirá...
¡gástelo usté con zalú!

Canina... arrímate acá.
Ya lo ves, pazó el potriyo;
juerza el mojalo zerá ;
con que vamo al ventorriyo,
Güen golpe, ¿es verdá, chorré?
y en zeguro lo hemos dao…
¡Várgame Dios, lo que pué
con los jacoz el zalvao ;
y el güen hombre no ha alvertío...
¡zi ez esto una maraviya!,
que el peyejo está cosío
maz acá e la paletiya.
Ni que la clin, ni la cola,
ni los piños, zon verdá...
¡Canina! con mi parola
tó ze lo jize tragá,
¡ Jezucristo!.., ¡vaya un topo!...
no ze yeva mala ardiya...
¡Ja, ja!... Dios jaga que el jopo
ze le tenga hasta Zeviya.

Y pues que tantos ducaos
al fin nos valió el potriyo,
¡Chavó!... con nuestros pecaos
vámonoz al ventorriyo.

Francisco Rodríguez Marín

Francisco Rodríguez Marín 1855-1943

Nazió en Ozuna (Zebiya) aonde izo er baxiyerato. En zu hubentú curtibó er periodihmo en zu pueblo fundando lô periódicô “El Ursaonense” i “El Centinela” uzando como zeudónimo El bachiller Francisco de Osuna, Tamién ehcribió en “El Alabardero” e Zeviya. En 1874 ze ba a la Uniberzià Ihpalenze pa ehtudià Filozofía i Letrâ i Derexo, dohtorándoze en Leyê. De mu hoben le zale la bena poética, publicando zû colecionê poéticâ “Suspiros” (1875), “Auroras y nubes” (1878); i le da pô lâ imbehtigacionê ihtóricâ locale i pô recohè zû primerâ compilacionê forclóricâ.
En Zebiya z’ahunta con intelectualê como Demófilo, Guichot, Lasso de la Vega, etc. creando con eyô la “Sociedad Folklore Andaluz”. Zimurtaneo zu trabaho d’abogao, primero en Ozuna i endihpuè en Zebiya, con er curtibo e zû afizionê primerâ: la leteratura y er forclore. D’ehta época zon zû librô titulaô “Ciento y un soneto”, “Madrigales”, “los Refranes del Almanaque”, “Mil trescientas comparaciones populares andaluzas”, “Cinco cuentezuelos populares andaluces” i zobre tó zu ehtenza colección e “Cantos pupulares españoles”, en bariô tomô.
La pérdia e la bò cazi der to a cauza d’una operazión e larinhe le izo dehà l’abogazía po lo qe tubo mâ tiempo pa edicaze a lâ letrâ, zu gran pazión. Zu relazión con Menéndez Pelayo zirbió pa q’encauzara zu bocazión po er camino e la imbehtigazión ihtórico-leteraria. Ze izo un ehperto conozeò i crítico e lô autorê der ziglo d’oro, en henerà, i la obra cerbantina, en particulà, lo qe le balió un gran reconozimiento e la Academia en 1905.
En zu boluminoza obra e recopilazión “Cantos populares españoles” ai munxô d’eyô qe zon d’Andaluzía. Rodríguez Marín, lo mihmo q’iziera zu amigo Demófilo en zu colección e “Cantes Flamencos” tubo qe buhcaze unâ mínimâ reglâ ortográficâ pa reprezentà la fonética andaluza e lâ coplâ. En l’apartao e leteratura populà e la rebihta La Enciclopedia, F. Rodríguez Marín publicó en andalú, en 1880, “Cinco cuentezuelos populares andaluces”. Como zu amigo Demófilo tamién ze qeha e “que carezcamos de un sistema de escritura que represente con exactitud las modificaciones fonéticas que se advierten en el lenguaje del pueblo andaluz”, y por lo tanto “a falta de él, voy, de pasada, a dar aquí unos breves apuntes sobre fonética andaluza”.
Rodríguez Marín mete tô lô fenómenô fonéticô e l’andalú en relazión ar cahteyano en dô grandê apartaô: Elizión i zubrogazión. Zon elidiblê la d, n, r, z i l; la ll è y; zuele azé l’ahpirazión de f i h anqe é rara l’ahpirazión e la s imploziba, zuhtituye la h mua, azín como la b i v pô g lante er diptongo ue o lante o, apaeze r en lugá e d en lô imperatibô; b en lugá e g menô en pozizión inizià; la v ziempre è b; argunâ bezê apaeze i en bè d’ e i er grupo nm ze tranforma en rm.

Paco Arbadulí


Textos:

«Diendo er Señó con San Pedro por un camino alante, le preguntó er Debino Maestro: «¿Cuár clase de fruta es la que te gusta más que toas?». San Pedro de güena gana hubiera dicho que las ubas; pero por tá quer Señó, que sabía qu'era afisionao ar bino, no juera a secá las parras, ba y piensa: «Le diré que la que má me gusta es los jigos, a bien que no los pueo bé ni pintaos y naíta me se da que s' achicharren toas las jigueras er mundo».

Y sarta y dise: «Señó, aonde yegan los jigos no yega ná pa mi gusto». Y le ise er Señó, ísele: «Pos ya qu'es asina, qu'en dej'ahora haiga un pá e cosechas al año». San Pedro, e rabia que le dio, se pegó un tirón d'una oreja, isiendo pa su buche: «Hemos jecho un pan com 'unas hostias: si l'hubiea dicho que las ubas, habría bino nuebo dos beses al año». Y bea 'sté por donde San Pedro tié una oreja má baja que la otra y las jigueras tién dos cosechas al año».

(Cinco cuentezuelos populares andaluces)

CANTOS POPULARES

Recogidos, ordenados e ilustrados por Francisco Rodríguez Marín

publicado en Sevilla en 1882

De todos los cantos recogidos por Rodríguez Marín hemos escogido unos cuantos teniendo en cuenta sólo las distintas soluciones que nos da para escribir el andaluz. Aunque con contradicciones, es interesante ver la variedad de formas ortográficas y el empleo de vocabulario arcaico que podría ser interesante recuperar.


Desde que me fí ar serbisio
Y que mi tierra dejé
No pienso más qu' en mi mare
Y en la mujé que yo sé.

Toítas las mañanas
M' alebanto y digo:
Er luserito qu' á mí m' a1umbraba
Ya no está cormigo.

Ya me s' acabaron
Las días y benias,
Los paseitos - que por berte daba,
Compañera mia.

¡basayarme te propones!
Tú tiê 'n la cabesa un nío
E pajariyos culones.

Gastas mucha fantesia;
Parese que tú has pisao
La flor de la tontería.
Gastas mucha fantesia
Y te tienes e queá
Señalando con er deo,
Como se queó San Juan.
T' ajoga la fantesía,
El orguyo y er coraje,
Y no sabes, probe tonto,
Qu' estás guindao del aire.
Gastas mucha fantesía
Y estás guindao del aire;
Esos jumos que terelas
Sa menesté que s' acaben.
La fantesía t' ajoga,
Te siega la baniá
Y tu presona no tiene
naitita e particulá.
Gasta usté más fantesia
Qn' er coche del Intendente
Y no bal' usté dos cuartos
Ni ninguno de su gente.
Ascuch' usté, mosa güena,
No gast' usté fantesía;'
Qn' er carro de la basura
Tamien gasta campaniyas.
!Salero, biba 'r salero¡.
¡Biba la sá y la sandunga!
Que bal' usté más pesetas
Que clabos tiene una arcusa.
Mi amante ba de camino;
La Birgen baya con él
Y 1o traiga en su compaña
Hasta que lo buerba a bé.
Jasta er mueye fuimos juntos
Y platicando los dos
Y ¡ayí fueron los lamentos,
Cuando eya me dijo adios!
L' agarré' la mano
Y la yebé ar mueye;
¡Que las olitas - der má l' acompañen!
¡Mi Dios 1a consuele!

Yo me subí á un arto pino
Por ber si la dibisaba;
Lo que dibisé fué 'r porbo
Der coche que la yebaba.

Faitigas me dieron,
Ganas e yorá,
Cuando te bide - metio 'n er tren,
La máquina andá.

Cuando mi gitano
S' apartó de mí,
De las faitigas - que me dieron, mare, Ar suelo caí.

¡Mal haya mi sueño,
Que tanto he dormío!
Corno s' ha dio - la mia compañera
Y no la he sentío.

¡Mare, yo me boy con é.
S' ha yebaíto ese hombre
La raís de mi queré!

A la Crus de la Ensina
No bayas,, primo,
Porque ya la paloma
No está 'n er nio.
Primo, no bayas,
Porque ya la paloma
no esta 'onde 'staba.

Demófilo

DEMÓFILO

Er pae lô h’ermanô Antonio i Manué Maxao an qeao eclipzaô en populariá por zû z’ihô.
Demófilo, q’è er zeudónimo q’utilizaba D. Antonio Machado y Álvarez i por er q’è mâ conozío, nazió, un poqiyo por cazualià, en Santiago de Compostela, er zeî d’abrì e 1864, aonde zu pae dezempeñaba la cátedra de fízica; ziendo trahladao a Zebiya a lô cuarenta diâ e zu nazimiento. Ehtudió filozofía i letrâ –yegando a ocupà la cátedra e Metafízica en Zebiya- i Derexo, -yegando a eherzè d’abogao i huè-. A pezà e zû laborê dozentê i hudizialê no dehó e curtibà zu verdaera ebozión literaria.
Mu pronto ze dió a conozè como curtibaó e lô ehtudiô e literatura populà con una zerie artículô qe publicaba en la rebihta menzuà e filozofía, literatura i zenziâ e Zebiya, primero, i La Enciclopedia, endihpuê. En ehta úrtima rebihta, en zu apartao e literatura populà, hueron zaliendo cuentô, huegô infantilê, refranê, zupertizionê, tradizionê, cantô, uzô, zeremoniâ, etc, qe entangariyaron un interezantízimo materià qe no pazó dezaperzibío a ehtudiozô uropeô como Hugo Shuchardt qe le felizitaron por zu trabaho e recopilaó.
A penâ z’enteró e la creazión en Londrê e la “Folk-lore Society” ze puzo en contahto con eyô e impurzó en Ehpanya la creazión de zoziedaê forclóricâ, penzando qe lo mehó zería qe ze crearan a nibè regionà pò la gran barieá i perzonaliá d’ehtâ. Azín nazió la “Sociedad Folk-lore andaluz” en nobiembre e 1881, qe duró lo qe aguantó Demófilo. Murió en Zebiya en 1893.
Ar recohè coplâ, refranê i dixô popularê, Demófilo tubo la nezeziá e reproduzì gráficamente la pronunziazión andaluza. Endihpuè e lamentaze qe “carecemos de un sistema escrito que represente con exactitud las modificaciones fonéticas que se advierten en el lenguaje del pueblo andaluz” tubo q’elaborà, antê e conozè a Shuchardt, unâ mínimâ reglâ ortográficâ recohíâ en un artículo zuyo: “Apuntes para un artículo literario”. Azín bemô como utiliza la “y” pa ehprezà er yeihmo; la “b” pa ehprezà er zonío “b” i “v”. Zegún er propio Demófilo, al andalú “la pronunciación de la s como silbante le fastidia y enoja”.La “h” delante er dihtingo “ue” zuena como “gue”. Utiliza “er” tanto pa la contrazión e la prepozizión “de” i l’artículo “el”, como zolo pa l’artículo “el”. Elimina la “l”, la “r” i la “d” der finà e palabra, azentuando la úrtima bocà zi la palabra è agúa. Ahpira la “h” qe reprezenta con la “j”, i è henerà la caía e la “d” interbocálica, incluzo en la prepozizión “de”. Anqe qizo zegì ezâ mínimâ reglâ, lo izo zin munxa coerenzia.
Demófilo, conziente e zû limitazionê, ze qeha en er prólogo e zu “Colección de Cantes Flamencos (1881)” e qe er profezò Hugo Schuchardt “quien habiendo comenzado un artículo sobre fonética andaluza, nos dejó como decirse suele, con la miel en los labios, sin proveernos de aquellos conocimientos que tan indispensables nos hubieran sido en esta ocasión, para aceptar un sistema de ortografía adecuado al dialecto que habla la gente de esta bendita tierra.”

Paco Arbadulí

Argunô tehtô e Demófilo:

LOS SOMBRERITOS

Ar salí los nasarenos
E Santa María,
Er barcón que estaba enfrente
Se desprendía.
Mamá.
Ar salí los nasarenos
Er Biernes santo,
Er barcón que estaba enfrente
Se bino abajo.
San Juan con er deo tieso
¡Qué gracia tubo!
Er barcón que se cayó
No lo detubo.
Ahora sí que no paso yo
Por debajo d'ese barcón.
No se baya a desprendé
Me mande a San Juan de Dios.
Cuando los nasarenos
Salen de Ronda,
parecen las mositas
Perros con moñas.
Desde que bino el uso
De archiduquesas,
Paresen las mositas
Rompe-cabesas.
Estos son los sómbreritos
Blancos y selestes,
Que se benden en Sevilla
Caye e las Sierpes.
Estos son los sómbreritos
Selestes y blancos,
Que se benden en Sevilla
En caye Francos.
Estos son los sómbrenlos
Que gasto yo,
Que me sirben de paraguas
Y quitasol.
Desde que bino el uso
De las peinetas,
Paresen las mositas
Gayos con cresta.
Desde que bino el uso
De los porbiyos,
Paresen las mujeres
Arfajoriyos.

ALEGRÍAS

ROMERAS DEL GRANAINO

Por Dios te pío Romera
que no me saques cantares,
como te llegue a cojé
er santolio no te bale.
Por Dios te pío Romera
que a la puerta no te asomes,
que ba mucha diferensia
en se tú rica y yo probe.
Toma ese pañolito
que no lo quiero pá na,
pa que le tapes la cara
a Manolito er Charrán.
ESTRIBILLO
¡Ay! Por Dios, por el amor de Dios
Romera pasa por tó,
la fuente bieja s' arborotao
porque Frascola s'amborrachao.


ORACIÓN DE LA RAÍZ.- (SEVILLA)

Anima
reta y perfeta
y puesta en buena compañía,
nuebe alma s'os pido y nuebe me tenéis que dá;
tres de tres hermosas donsellas
y tres del ajustisiao
y tres del ajorcao.
Estas nuebe almas
las agarrarás
con la raís de piera iman
para que yo pueda arcansá
y gosá
lo que sea e mi boluntá.
Entro y consiento en er pauto
que no sea creminá.

ORACIÓN DE LOS PORBOS

ARCANSAORES Y BENSEORES.-

(SEVILLA)

Sanfajanidá,-suerte eché á la má;-si buena la eché-mejó la saqué;-por su santidá,-por tu birginidá,-ni lo que te pío-me lo tienes que otorga,-ni los porbos arcansaores ni benseores-de lo que quiero lo otorgará.-Entro y consiento-en er pauto creminá.

Antonio Machado y Álvarez (Demófilo)

El Folk-lore andaluz

Colección “Biblioteca de la Cultura Andaluza” nº 50

Coplas.-

Soleares de cuatro versos (Cantes Flamencos recogidos y anotados por Demófilo DVD ediciones, Los Cinco Elementos, 1998)

36

Los ojitos e mi cara
Quién los compra, que los bendo,
Mira si soy esgrasiao
Que hasta los ojitos bendo.

37

Los ojitos e mi cara
Tienen los cristales muertos,
S' han metío en er queré,
No saben lo que s'han jecho.


38

Mala puñalá te peguen
Que te den los Sacramentos,
Porque no le tienes ley
Ni a la camisa e tu cuerpo.


39

Mardita sea la persona
Que se yeba der dinero
y no se deja yebar
E unos ojos negros buenos.


40

Mar doló te mande Dios
Como con otro te bayas,
Que t' has yebaíto mío
Sangre mía en tus entrañas.


41

Malhaya sea la persona
Que a mí me enseñó a queré,
Que estaba yo en mi sentío
y ahora me encuentro sin él.


MARTINETES:

4

Er señó Gobernaó
Ar generá l’ha peío
Siento sincuenta sordaos,
Y que sean escojíos,
Y que sean escojíos,
Se lo esía al arcarde,
Mañana, por la mañana,
Estén a la puerta e la carse.
A la puerta e la cárse,
Y esía er generá
De que binieran toitos
A bayoneta calá.

Juan Ignacio González Del Castillo

Juan Ignacio González Del Castillo (1763-1800)

Ehte perzonahe nazío en Cai en 1763 è conziderao hunto ar madrilenyo Ramón de la Cruz er mà prinzipà zainetero der ziglo XVIII. En zu corta bia (murió a lô treinta y ziete anyô) ehcribió, hueraparte d’argunâ comediâ i una zarzuela, cuarenta i cuatro zainetê qe no ze publicaron ahta argunô anyô endihpuê e zu muerte, pero qe ze reprezenton en er Teatro Principà e Cai a onde hué apuntaò. Anqe no ze pué conziderà dihzípulo der Ramón de la Cruz, zi qe bemô zu influenzia en argunâ e zuh obrâ. En argunô zainetê ambientaô en zu Cai natà recohe l’abla populà zarpicá d’andaluzihmô con argunô toqê e caló.Tamién ze le pué conziderà como un adelantao der cohtumbrihmo romántico anqe con una poqiya razión e crítica zoziá.Tamíen ze pué izí q’è un precurzò de la yamá “zarzuelita andaluza” tan ehtendía en er ziglo XIX, ya qe en zuh obrâ ze cantan copliyâ como tiranâ, tonà, tonaíyâ, zeguiiyâ y romanzê e ciego. Ê de zuponè qe la mayoría e zû perzonhê ze ehprezan en andalú anqe zolo en er zainete El gitano Canuto o El día de toros en Sevilla : sainete nuevo para trece personas. Utiliza argo de grafía andaluza en er leguahe der Canuto, zobre tó, i un poqiyo en otrô perzonahê como zu ermana Carmen i zu compae Norberto.
Lâ zoluzionê ortográficâ mà heneralê q’emplea zon: la pérdida e “d” iterbocálica como en toas, toitas, boegón, naa, toavía, pueo, pegao, múo…, incluzo en er pronombre “de”; argunâ becê ahpira la “h” múa como en jace, jambre, junde, giée (hiere) i en otrâ ocazionê ai pérdida de “r” como en giée (hiere), pa (para) quié (quiere)

Gaspar Fernández y Ávila

GASPAR FERNÁNDEZ Y ÁVILA

Mu poqiyo zabemô d’ehte perzonahe nazío en Málaga entre 1733 i 1737. Namàqe hue párroco der pueblo e Cormenà (Málaga) por mâ de trê décadâ, i qe hue en loh úrtimô qinze anyô de zu bía canónigo benefiziao en Málaga. De la obra zuya muh á yegao un auto zacramentà con er título de LA INFANCIA DE JESU-CHRISTO. Hueraparte d’argunà referenziâ e rahgô fonéticô andaluzê en obrâ mâ antiguâ q’éhta i qe recohemô en er trabaho Rahô dialertalê i ortografíâ en tehtô andaluzê, podemô conziderà er tehto ehte como er primero ande l’autò qiere recohè apohta rahgô der lenguahe populà andalú. Pa eyo, er cura e Cormenà recurrea dô pahtorê, Rebeca y Josef, q’en zû relatô utilizan munxâ ehprezionê andaluzâ i diberzâ zoluzionê ortográficâ qe z’an ío empleando dihpuè. To eyo arrebuhao con er zayagè carahteríhtico der lehguahe pahtorì.
Abemô cohío un pazahe de la edizión q’izo la Cátedra d’ihtoria e la lengua espanyola e la Universiá e Graná. (GASPAR FERNÁNDEZ Y ÀVILA, La Infancia de Jesu-Christo (1784). Estudio, edición crítica, notas y vocabulario por Francisco Torres Montes. Universidad de Granada, 1987.)
Paco Arbadulí
La Infancia de Jesu-Christo (FORMATO PDF)